Microrelato: ¿Te odio o te quiero?

Estábamos en hora libre, pues la profesora de Literatura había faltado, justo la materia que más quería tener, no la tendría. Yo me encontraba sola sentada en un rincón de la clase con mi novela preferida, pues no tenía nada mejor para hacer, mi mejor amiga no estaba, y con mis demás compañeros no solía hablar mucho. Así que estaba ahí, con la novela en mis manos, cuando de pronto...
-¿Qué lees?-Me dijo él, él chico con el que vivía peliando, pero amaba peliarlo, él chico más inmaduro que se creía divertido, solo era un pobre inútil que quería simpatizar con todo el mundo, pero no me cae bien la gente que se hace la simpática.
-¿Acaso no sabes leer? el titulo esta en la tapa- Y se la mostré.
-Uff...siempre respondiendome de mala manera...solo preguntaba-
-Bueno si no quieres que te responda mal, no vengas a preguntar nada-
-Ok, yo me intereso por ti y tu a cambio me gritas y me llamas inmaduro a mi...creo que gustas mio, por eso me tratas mal.
-¿Qué yo qué?gustar tuyo...pues...-No lo había pensado, tal vez tenía razón...no claro que no tenía razón yo lo odiaba por ser como era...pero...si lo odiaba-No seas idiota yo no gustaría tuyo ni aunque fueses el único chico del mundo-.
-Te gusto, te gusto...afrontalo...pues si no es así dime ¿Por qué me odias tanto, cuando yo solo me quiero acercar a vos?-
-Yo no te tengo que dar ninguna explicación de nada...acá el que me parece que gusta de alguien eres tu...tu gustas mio-
-Es verdad, pero creí que eras más inteligente, pensé que ya te habías dado cuenta...¿Por qué crees que me acerco a ti?...respuesta sencilla porque por más que me trates mal, te quiero, eres inteligente, bonita, y te haces la mala, me gustas lo afronto y mucho-
-Pues....pues...no se que decir....solo que no me hago la mala, y vete porque tu a mi no me gustas-sería que el tenía razón, ¿Por qué cuando dijo que gustaba mio mi corazón comenzó a latir mucho mucho, porque por dentro me alegre?...¿Sería que decía odiarlo para no afrontar que lo quería?.
-Ok me voy, pero yo estoy seguro que gustas mio, TE AMO-y se fue.
-Yo trate de disimular mi alegría, pues me había gustado que me dijese que me amaba, pero todavía no afrontaba que yo también a él, así que seguí leyendo mi novela, aunque por dentro ya no me interesaba lo que pasaba con la protagonista de ella.